martes, 12 de marzo de 2013

Vencedores o vencidos (Judgment at Nuremberg.- Stanley Kramer, 1961)



“Jueces que recibirán la Justicia que ellos negaron a otros”.

"Jenning: Juez Haywood, la razón por la que le pedí que viniese... aquella pobre gente... aquellos millones de personas. Jamás supuse que se iba a llegar a eso ¡Debe creerme! ¡Debe usted creerme!

 Haywood: Señor Janning, se llegó a eso la primera vez que usted condenó a un hombre sabiendo que era inocente."

“Ser lógico no significa ser justos. Y no hay nada en la Tierra que pueda hacerlo justo”.

“No se puede vivir odiando. Tenemos que olvidar si hemos de seguir viviendo.”

“Un juez no es quien promulga leyes sino quien hace cumplir las de su país, la frase “mi patria ante todo con razón o sin ella” pronunciada por un gran patriota americano no es menos cierta para un patriota alemán, si no se cumplían las leyes de su país, se convertiría en traidor de su patria;  no es solo a los jueces a quienes se procesa aquí sino a todo el pueblo alemán”.

El descendimiento de la Cruz - Roger van der Weyden



EL DESCENDIMIENTO DE LA CRUZ
ROGER VAN DER WEYDEN

"El descendimiento de la cruz" (en neerlandés, De Kruisafneming), es considerada la obra maestra del pintor flamenco Roger van der Weyden (1400-1464). Es un óleo sobre tabla, pintado con anterioridad al año 1443, probablemente hacia 1436 y mide 220 cm de alto por 262 cm de ancho. Se exhibe actualmente en el Museo del Prado de Madrid. Es conocido, generalmente, como El Descendimiento.

Es la tabla central de un tríptico, cuyas alas laterales han desaparecido. Van der Weyden se enfrenta con el problema de encajar un gran número de personajes y una escena de gran complejidad en una tabla de dimensiones no muy grandes estipulada por quien encarga la obra. El tema es típico de la pintura religiosa gótica: Cristo en el momento de ser bajado de la cruz.

Roger van der Weyden encaja a las figuras en un espacio apaisado, en forma de urna. El fondo es liso, de oro, elemento típicamente gótico; de este modo, las figuras parecen esculturas policromadas.

Tradicionalmente, los retablos escultóricos eran más costosos y cotizados que los pintados; se puede decir que el artista recreó con trucos ópticos un grupo escultórico que hubiese resultado mucho más caro. El fondo de oro tiene además un sentido simbólico, como ya se le daba en Egipto: simboliza la eternidad y es propio de lo divino.

En el primer término, abajo, hay un pequeño fragmento de paisaje, con pequeñas plantas, un hueso alargado y una calavera junto a la mano de María desmayada. Presentar un pequeño matorral vivo junto a la calavera podría aludir a la vida después de la muerte, tal como sostienen las creencias cristianas. La ausencia de paisaje en el resto del cuadro centra toda la atención en las figuras, que se alojan en un espacio reducido. Las clavos ya se han quitado y el cuerpo de Cristo es bajado de la cruz y recibido por los brazos de José de Arimatea y tal como se describe en los Evangelios, este envuelve el cuerpo de Cristo en un paño blanco del lino, impregnado de sustancias aromáticas. Aparece un anciano de barba blanca identificado como Nicodemo que ayuda a José de Arimatea a sostener el cuerpo exánime de Cristo con la expresión de consternación a que obliga el fenómeno de la muerte.

Hay dos parejas de figuras que se representan paralelamente: María Magdalena y Juan en los extremos englobando el grupo en una especie de paréntesis, y la Virgen María y su hijo Jesucristo en el centro. Al lado derecho, María Magdalena se dobla, consternada por la muerte de Cristo. Es la figura más lograda de todo el cuadro en cuanto a la expresión del dolor. Su movimiento corporal se repite en la joven figura de Juan, vestida de rojo, en el borde izquierdo. Por su parte, la Virgen María es representada sufriendo un desfallecimiento y doblándose. Jesucristo aparece en la misma posición que su madre, lo que significa que los dos sufren el mismo dolor, ilustrando así en la Compassio Mariae, esto es, en el paralelismo entre las vidas de Cristo y la Virgen.

Las posiciones del brazo de Jesucristo y de la Virgen expresan las direcciones básicas de la tabla. Puede trazarse una diagonal de la cabeza del joven que ha liberado a Cristo hasta la Virgen y el pie derecho de San Juan. Los rostros están alineados horizontalmente, alineación que viene suavizada por la línea ondulada de las expresiones corporales de los personajes.

Van der Weyden ha representado a María Magdalena con un cinturón que simboliza la virginidad y la pureza. Este cinturón se encuentra alineado con los pies de Cristo y la cabeza de la Virgen, y en él aparece una inscripción que hace referencia a ambos: IHESVS MARIA. La vestimenta de los personajes sirve como símbolo de su clase social. Ninguna de ellas permitía representar las calidades de los objetos y de las telas como la pintura al óleo. De esa manera, Van der Weyden en esta pintura se explaya, en la concreción de las calidades y dependiendo de la clase social del personaje selecciona visón, seda, brocados, raso de azul, lapislázuli para la Virgen...

Otra muestra del preciosismo de la pintura flamenca, gracias a los avances de la técnica del óleo, se muestra en las calidades de los objetos. Hasta este momento la técnicas utilizadas en la pintura eran el temple y el fesco o pintura mural.

Los ropajes y el claroscuro proporcionan los efectos lumínicos. Los colores fríos caracterizan a los personajes más patéticos: las mujeres y el joven subido a la escalera; los demás personajes visten colores cálidos.

Es un cuadro cargado de simbolismo religioso, en el que es llamativo el maravilloso juego de paralelismos y simetrías entre los componentes del cuadro. El pintor desplegó en esta escena toda una gama de exquisitos matices y de doloridas expresiones, con una profunda emoción religiosa, provocando la emoción del espectador ante las expresiones de los personajes.

Las Meninas - Diego Velázquez

 
LAS MENINAS - DIEGO VELÁZQUEZ
ÓLEO SOBRE LIENZO 318cm x 276 cm - BÁRROCO

"Las Meninas", como se conoce el cuadro desde el siglo XIX, o "La familia de Felipe IV" según se describe en el inventario de 1734, se considera la obra maestra del pintor del siglo de oro español Diego Velázquez. Acabado en 1656, corresponde al último periodo estilístico del artista, el de plena madurez. Como sucede con la mayoría de las pinturas de Velázquez la obra no está fechada ni firmada y su datación se apoya en la información de Palomino y la edad aparente de la infanta, nacida en 1651. El cuadro se halla expuesta en el Museo del Prado de Madrid, donde ingresó en 1819 procedente de la colección real.

Será en 1843, en el catálogo de las obras del Museo del Prado hecho por Pedro de Madrazo, cuando reciba el nombre de "Las Meninas", que proviene de la descripción del cuadro que realizó el pintor y escritor Antonio Palomino (1653-1726) en su obra "El museo pictórico y escala óptica", donde decía que «dos damitas acompañan a la Infanta niña; son dos meninas». Con este nombre, de origen portugués, se conocía a las acompañantes, generalmente de familia noble, que servían como doncellas de honor a las infantas, hasta su mayoría de edad.

El tema central es el retrato de la infanta Margarita de Austria, colocada en primer plano, rodeada por sus sirvientes, «las meninas», aunque la pintura representa también otros personajes. En el lado izquierdo se observa parte de un gran lienzo, y detrás de éste el propio Velázquez se autorretrata trabajando en él. El artista resolvió con gran habilidad todos los problemas de composición del espacio, gracias al dominio que tenía del color y a la gran facilidad para caracterizar a los personajes. El punto de fuga de la composición se encuentra cerca del personaje que aparece al fondo abriendo una puerta, donde la colocación de un foco de luz demuestra, de nuevo, la maestría del pintor, que consigue hacer recorrer la vista de los espectadores por toda su representación. Un espejo colocado al fondo refleja las imágenes del rey Felipe IV y su esposa Mariana de Austria, medio del que se valió el pintor para dar a conocer ingeniosamente lo que estaba pintando, según Palomino, aunque algunos historiadores han interpretado que se trataría del reflejo de los propios reyes entrando a la sesión de pintura o, según otros, posando para ser retratados por Velázquez, siendo en este caso la infanta Margarita y sus acompañantes quienes visitan al pintor en su taller.

Las figuras de primer término están resueltas mediante pinceladas sueltas y largas con pequeños toques de luz. La falta de definición aumenta hacia el fondo, siendo la ejecución más somera hasta dejar las figuras en penumbra. Esta misma técnica se emplea para crear la atmósfera nebulosa de la parte alta del cuadro, que habitualmente ha sido destacada como la parte más lograda de la composición. El espacio arquitectónico es más complejo que en otros cuadros del pintor, siendo el único donde aparece el techo de la habitación. La profundidad del ambiente está acentuada por la alternancia de las jambas de las ventanas y los marcos de los cuadros colgados en la pared derecha, así como la secuencia en perspectiva de los ganchos de araña del techo. Este escenario en penumbra resalta el grupo fuertemente iluminado de la infanta.


Vladimir Nabokov por él mismo



Su nombre completo era Vladímir Vladímirovich Nabókov, un escritor ruso nacionalizado estadounidense que nació en San Petersburgo un 22 de abril de 1899. Escribió sus primeras obras literarias en ruso, pero se hizo internacionalmente famoso como un maestro de la novela con su obra escrita en inglés, especialmente su novela "Lolita" (1955), un retrato de la sociedad estadounidense a través de la metáfora del viaje, en cuyo trama un hombre de mediana edad se enamora y sostiene una relación con una adolescente. Esta y sus otras novelas, especialmente "Pálido fuego" (1962) y, sobre todo, "Ada o el ardor" (1969), le proporcionaron un lugar entre los grandes novelistas del siglo XX. Los detractores de Nabókov le reprochan el ser un esteta y su excesiva atención al lenguaje y al detalle antes que al desarrollo del carácter de los personajes. Es conocido también por sus significativas contribuciones al estudio de las mariposas, en la fotografía que acompaña el texto lo podemos ver en plena faena entomológica. En la década de 1940 estuvo a cargo de la colección de mariposas de la Universidad de Harvard, y el género Nabokovia recibió este nombre en su honor. No es tampoco desdeñable su afición por la creación de problemas de ajedrez. Murió en la ciudad suiza de Montreux el 2 de julio de 1977.
 
Algunas citas suyas:

 "El romper de una ola no puede explicar todo el mar."

"Pienso como un genio, escribo como un autor distinguido, hablo como un niño"
 
"Sólo existe una escuela de literatura, la del talento."

"La curiosidad es insubordinación en su más pura forma."

"Las cosas que aborrezco son sencillas: la estupidez, la opresión, la guerra, el crimen, la crueldad. Mis placeres son escribir y cazar mariposas."

"Un cambio de ambiente es la falacia tradicional en la que confían los amores -y los pulmones- condenados."

"Un sentimental puede ser una perfecta bestia en sus ratos libres. Una persona sensible no será nunca cruel."

"Lolita, luz de mi vida, fuego de mis entrañas. Pecado mío, alma mía. Lo-li-ta: la punta de la lengua emprende un viaje de tres pasos desde el borde del paladar para apoyarse, en el tercero, en el borde de los dientes. Lo.Li.Ta." De su obra "Lolita"

"Lo, sencillamente Lo, por la mañana, un metro cuarenta y ocho de estatura con pies descalzos. Era Lola con pantalones. Era Dolly en la escuela. Era Dolores cuando firmaba. Pero en mis brazos era siempre Lolita." - De su obra "Lolita"

"No pienso en lenguajes, sino en imágenes."

"El político sentimental puede acordarse del día de la madre y aniquilar implacablemente a un rival. A Stalin le encantaban los niños. Lenin lloraba en la ópera, sobre todo en La Traviata. Todo un siglo de autores cantaron la vida sencilla de los pobres. Por autores sentimentales nos referimos a la exageración no artística de emociones corrientes, que pretende provocar automáticamente la compasión tradicional en el lector."

"Un racimo de estrellas brillaba plácidamente sobre nosotros, entre siluetas de largas hojas delgadas; ese cielo vibrante parecía tan desnudo como ella bajo su vestido liviano." De su obra "Lolita"

"La existencia es una serie de notas a pie de página de una vasta y oscura obra maestra sin terminar."

"(...)Trato de imaginársela; todo lo que pudo visualizar fueron visiones fugaces de rasgos sin relación entre sí: el contorno suave de sus pómulos en el sol, la ambarina oscuridad de sus ojos vivos, sus labios en forma de sonrisa amistosa que siempre estaban prontos a cambiarse en un beso ardiente." De su cuento "La primavera en Fialta"

"¡Qué delicioso alborozo sentía correr por mis venas, cuan agradablemente todo mi ser respondía a las vibraciones y efluvios de aquel día gris saturado de una esencia primaveral, que en sí parecía lenta en percibirse!" De su cuento "La primavera en Fialta"

"La vida es una gran sorpresa, la muerte es aún más grande."

"La vida es un gran amanecer. No veo por qué la muerte no debe serlo aún mayor."

"Nuestra existencia no es más que un cortocircuito de luz entre dos eternidades de oscuridad"

"Sus ojos fijos en la parte inferior de mi cara como si me leyese los labios, y después de un momento de reflexión (su comprensión amatoria era incomparable) dio la vuelta rápidamente y cimbreándose sobre sus esbeltas caderas, me condujo por el pasillo alfombrado de azul." De su cuento "La primavera en Fialta"


Esta entrada está tomada de la página del escritor José Manuel Pérez Padilla, que os recomiendo sin reservas que visitéis. Os dejo el enlace: http://www.facebook.com/PerezPadilla.Novelas?ref=ts&fref=ts

Juan José Millás: La fantasía de lo cotidiano



"Cuando empecé a crecer, ya estaba todo roto: rotas las vidas de mis padres, eso era evidente, y rotas las nuestras, que habíamos sido violentamente arrancados de la clase social y del lugar al que pertenecíamos. Cuando pasó el verano, nos dimos cuenta de que también la casa estaba rota. Si llovía, aparecían goteras que nos obligaban a desplazar las camas de sitio para colocar cubos que cada tanto era preciso vaciar. Si hacía viento, las corrientes de aire entraban de forma violenta en las habitaciones provocando estremecimientos sonoros en los bastidores de las ventanas, cuyos delgados cristales se agitaban como atacados por una embestida de pánico. No cerraban bien las puertas porque todo estaba fuera de quicio, de lugar, nada encajaba en su molde, tampoco las palabras con las que intentaban explicarnos por qué habíamos caído en aquella situación indeseable".
Fragmento tomado de su novela "El mundo"

Periodista y escritor, Juan José Millás, se marchó a Madrid desde su Valencia natal con apenas 6 años. Su obra, prolífica y reconocida con numerosos e importantes premios (entre ellos el Nacional de Narrativa, el de Periodismo y el Planeta), se basa en convertir el día a día en un acontecimiento extraordinario.

Según sus palabras “Nunca llegas a decir lo que quieres, pero te acercas, y esa es la eterna lucha del que se sienta a escribir”

Esta entrada está tomada de la página del escritor José Manuel Pérez Padilla, que os recomiendo sin reservas que visitéis. Os dejo el enlace: http://www.facebook.com/PerezPadilla.Novelas?ref=ts&fref=ts

Poema XVI - de "El tiempo detenido" - Carmen Rubio López

Muchacha en la ventana - Salvador Dalí


CARMEN RUBIO LÓPEZ (España)
De su poemario "El tiempo detenido"

XVI

Mis manos de hilandera ya no acuden
cada noche a su oficio.
Cobraron, de repente, autonomía,
y se mueven gozosas en torno a mi cintura;
me desvisten, me exponen
sin consideración, ante el espejo
que consiente a la vela un tibio claroscuro.

Desnuda, voy tomando
consciencia de mi aroma.
Exploro mis pupilas,
las leves hendiduras de mi piel
y mi rostro, y mi nuca y mis cabellos
que, sin pudor alguno, destellan con la llama.

Serenamente aguanto el quiebro de la noche.
Me recreo en mis formas -injustamente olvido-
casi me siento dueña
de esta primera vez sin mis heridas,
y dejo que mis dedos me regalen
con perfumes y aceites,
y me vistan de lino, blanco, como de mar,
para sentirme otra.

No reparo siquiera
en el hondón, que un día,
me dejaste en el lado derecho de la cama.
Tengo una sensación de espíritu que nace
como un viento robado al eco de los pájaros,
y tanta libertad me embriaga, me redime.

Me observo, sin un rastro
de culpa en la mirada.
No sé si esto es espacio o trampa de lo oscuro,
si este hallazgo de mí es vigilia o es sueño.
Siento que en el hogar se ha apagado el rescoldo.
Alguien dice mi nombre, y yo cruzo la puerta.

La amiga y poetisa Carmen Rubio López nos deja este poema suyo para celebrar el día de la mujer. Corresponde a su libro "El tiempo detenido" Premio "Juan Alcaíde" - Valdepeñas (C. Real). ¡Gracias Carmen!



"Atar los perros con longaniza"


El origen de esta curiosa expresión, que se suele utilizar con cierta ironía cuando se hace ostentación de riqueza o derroche, se remonta a principios del siglo XIX, y nació en Candelario, un pueblo de la provincia de Salamanca famoso por la calidad de sus embutidos y por el festejo del “Día de la Candelaria” cada 2 de febrero. En este pueblo, vivía el mejor fabric...ante de embutidos del lugar cuyo nombre era Constantino Rico, alias "El choricero" o "Tío Rico". Era tal la fama de la que gozaba que fue inmortalizado por el pintor Ramón Bayeu, cuñado de Goya, en un tapiz que hoy en día se exhibe en el Museo del Prado y que es la obra con la que se ilustra esta entrada. 
 
“El choricero” tenía montada en la planta baja de sus casa una pequeña fábrica en la que trabajaban varias empleadas. Todos los que trabajamos en la cocina o en labores parecidas sabemos que en determinados momentos una no puede dejar ni un instante lo que está haciendo, así, un día, no se sabe bien porque, apareció un perrito por la sala de embutir y resultando evidente el revuelo que podría causar un perro rodeado de todos aquellos embutidos se hizo necesario buscar una solución, y no pudiendo perder tiempo en echarlo por estar en plena faena, a una de las empleadas no se le ocurrió otra cosa, que utilizando lo que tenía más a mano, atar el perro a la pata de un banco con la ristra de longaniza que estaba embutiendo en ese momento. Al poco tiempo entró un muchacho, hijo de otra de las trabajadoras, a dar un recado a su madre y presenció boquiabierto la escena, e inmediatamente se encargó de divulgar la noticia de que en casa del "tío Rico" "se ataban los perros con longaniza".

La expresión, resultó tan afortunada, que tuvo pronta aceptación en todo el pueblo, para generalizarse posteriormente y difundirse por todo el País.

Tm Wolfe: El dandy vanidoso



Fácilmente se le podría etiquetar con el título de aquella película dirigida por Alexander MacKendrick en 1951 y protagonizada por Alec Guinness: "El hombre del traje blanco", tal ha sido la identificación de este sensacional escritor, un verdadero dandy, por los trajes elegantes e invariablemente blancos. Una fijación por el buen vestir que comparte con Gay Talese, un escritor con el que tiene muchos paralelismos, dada su condición de creadores de una nueva forma de entender el periodismo y la novela. El nombre completo de este sensacional escritor y periodista es Thomas Kennerly Wolfe y nació en 1931 en Richmond (Virginia - EEUU). Fue el creador, junto con Rex Reed, Hunter S. Thompson y Jimmy Breslin, del llamado «nuevo periodismo», destinado, según él, a suplantar al moribundo género de la novela. Defensor a ultranza de la cultura «pop» en los años sesenta, su mejor libro de este período es "Gaseosa de ácido eléctrico" (1968), relato de un viaje por EE UU en compañía del escritor Ken Kesey. Su obra posterior se ha caracterizado por un virulento tono polémico contra los liberales (La izquierda exquisita, 1970) o contra el narcisismo de los años ochenta (La década púrpura, 1982). Se ha distinguido como novelista con "La hoguera de las vanidades" (1987), que publicó por entregas en la revista "Rolling Stone". Con posterioridad publicó "The New America" (1989), "Fort Bragg" (1996) y "Todo un hombre" (1998).

Algunas frases suyas:

"Creo que este tipo de novelas, lo que podemos llamar novelas periodísticas o documentales, tienen un gran futuro, ya que son novelas con un intenso realismo social, el mismo tipo de análisis que se da en el nuevo periodismo, donde yo me encuentro muy a gusto. Esa es exactamente la fórmula de "La hoguera de las vanidades"

“Mailer no sabía escribir diálogos porque no escuchaba. Sólo sabía escribir sobre Norman Mailer”.

"Me costó mucho empezar a escribir novelas: me quedaba como catatónico en la mesa"

"Incluso a los 55 años sigues creyendo que hay un cordón que te une para siempre con tu juventud. Pero un buen día descubres que es sólo un hilo y que puede romperse en cualquier momento. "

"Un reportero es alguien con una taza de mendigo que está esperando una contribución a la cual no tiene derecho".

"Estoy convencido de que soy un reportero. No es falsa modestia. Para mí, ser reportero es una profesión apasionante".

"La mayoría de las veces que pensamos estar enfermos, lo creamos en la mente."

"La muerte es el último viaje, el más largo y el mejor. "

"La sanación más segura para la vanidad es la soledad. "

"La soledad es y siempre ha sido la experiencia central e inevitable de todo hombre."

"Hay que hacer un mundo protegido de la hipocresía. "

"Recuerdo que siempre sentía que iba a hacer algo grande. Es lo mejor que puede pasarle a un niño. Intentas hacer todo tipo de cosas. No dices nunca: Es imposible, no puedo hacerlo, no estoy hecho para esto."

"Si de verdad alguien quiere casarse, ya sea hombre o mujer, debería irse a Boston o a Cambridge. En Nueva York la gente está demasiado obsesionada con su vida profesional. Yo era así, y, como todo el mundo, no me tomaba muy en serio la palabra "relación".

"Si un conservador es un liberal que ha sido atracado, un liberal es un conservador que ha sido arrestado. "

"Un culto es una religión sin poder político."

“En este momento débil, pálido y desgastado de la historia de la literatura americana necesitamos que un batallón de Zolas se lancen a este país salvaje, barroco y desopilante y que lo reclamen como propiedad literaria.”

“La gran decepción en mi vida fue no ser jugador de béisbol profesional. Si me hubieran ofrecido un contrato, aunque fuera para la cuarta división, felizmente no hubiera escrito una sola palabra”.

"La tarea del escritor consiste en mostrar como el contexto social influye en la psicología personal."

"No hay un espectáculo en la tierra más atractivo que contemplar a una mujer hermosa cocinando para el hombre que ama. "

"(...) Demostrar que la realidad nos pasa delante de los ojos como un relato, en el que hay diálogos, enfermedades, amores, además de estadísticas y discursos. "

"Después de la Segunda Guerra Mundial, no existía el periodista literario que trabajase para revistas populares o diarios. Si un periodista aspiraba al rango literario... Mejor que tuviese el sentido común y el valor de abandonar la prensa popular e intentar subir a primera división. "

"El público numeroso que registran gloriosamente los anuarios de museos, todos esos estudiantes y excursionistas y papás y algún que otro intelectual...Son sólo turistas, cazadores de autógrafos, despistados, inocuos transeúntes por lo que concierne al juego del Éxito en Arte. Al público se le enfrenta a un hecho consumado y a la ya citada comunicación publicitaria, habitualmente en forma de artículo o de montaje de fotos a todo color en las páginas finales del Time. Es decir, un anuncio. "

"Estados Unidos está muy cerca de ser lo que los socialistas utópicos del siglo XIX andaban buscando. Una sociedad en la que todos tienen libertad política, tiempo libre y dinero para expresar sus anhelos."